cine

Cine independiente cubano: nuevos imaginarios
21 de junio

Cine independiente cubano: nuevos imaginarios

72177720309253253

La Casa de América coorganiza la mesa redonda Cine independiente cubano: nuevos imaginarios en la que participan las cineastas Carla Valdés León y Daniela Muñoz, y el cineasta José Luis Aparicio. El periodista, crítico de cine y profesor Dean Luis Reyes, será el encargado de moderarla.

La mesa redonda dará inicio a la muestra que, bajo el mismo título, comenzará el jueves 22 de junio con las proyecciones de los documentales Los puros, cortometraje de Carla Valdés León (2020) y La opción cero (2020), largometraje de Marcel Beltrán.

Otras películas que forman parte de la muestra son los cortometrajes de ficción: Gloria eterna (Yimit Ramírez, 2018); El rodeo  (Carlos Melián, 2021) y Tundra  (José Luis Aparicio, 2021); y los cortometrajes documentales: Petricor (Violena Ampudia, 2022); Umbra (Daniela Muñoz, 2021); Home (Alejandro Alonso, 2019) y Los perros Amundsen (Rafael Ramírez, 2017).

La muestra concluye el jueves 13 de julio con el largometraje de ficción Corazón azul   (2021) del guionista, director y productor Miguel Coyula.

La muestra ha sido curada por Carla Valdés León y José Luis Aparicio. Todas las sesiones serán acompañadas por sus directores, de forma presencial o virtual, y se realizarán coloquios al final de las proyecciones.

Los coloquios de las sesiones del jueves 29 de junio y la del jueves 6 de julio, serán moderados por la guionista y directora Lola Mayo.

👥Consulte AQUÍ la biografía de los ponentes.

🗓️ Ver calendario de la muestra  AQUÍ

📅 Miércoles 21 de junio de 2023
📍  Casa de América - Sala Simón Bolívar
▶  Entrada libre - Aforo limitado
⌚ 19.30h


 

 

Cine independiente cubano: nuevos imaginarios

Las obras reunidas en este ciclo despliegan los diversos derroteros creativos que transita en las últimas décadas el cine independiente de Cuba. Sus propuestas narrativas y formales divergen del modelo clásico y, en consecuencia, de los lugares comunes que se suelen asociar con el audiovisual de la Isla. Visiones autorales tan disímiles como las de Miguel Coyula, Daniela Muñoz, Alejandro Alonso, Carla Valdés, José Luis Aparicio, Violena Ampudia, Rafael Ramírez, Marcel Beltrán, Yimit Ramírez y Carlos Melián, son apenas una muestra de un movimiento artístico universal en su vocación, pero muy comprometido con el futuro del país y la creación de sus nuevos imaginarios.

Precedidas por selecciones, y algunos premios, en festivales como Sundance, IDFA, Rotterdam y Locarno, estas miradas toman distancia del melodrama y el costumbrismo para recorrer los espacios ruinosos, reales e imaginados, de una isla que soñó con la utopía. En los restos de ese futuro luminoso, conviven, más bien colisionan, distintas generaciones. De esa intensa fricción, no siempre un diálogo, resultan ahora estas películas. Imaginarios que migran o permanecen, que delimitan una tierra plural y común, difusa pero propia.

¿Cómo se relacionan, entonces, estas obras con su tiempo histórico? La muestra Cine independiente cubano: nuevos imaginarios intentan responder a esa pregunta. La mayoría de los cineastas aquí representados nacieron poco antes o justo después de la caída de la Unión Soviética, cuando en Cuba se agravaba una profunda crisis social, política y económica. Nuestros padres nos “doblaban las esquinas del mantel” para aliviarnos la escasez y las ausencias. Para evitar que viéramos la desesperanza. En esos años se comienza a forjar un cine alternativo a la narrativa institucional, desde sus elecciones estéticas a los modos de producción. Esta suerte de guerrilla continuó en las próximas tres décadas. Se encargó de decir: no estamos bien. Eligió el pensamiento y no la complacencia. Es el cine que hoy cristaliza en nosotros.

A partir de estilos y géneros diversos, nuestras películas exploran el incierto presente del país y algunos de sus conflictos más álgidos: la crisis social y el éxodo migratorio, el difícil diálogo entre generaciones, las relecturas críticas del pasado y las posibles configuraciones de la nación futura. Los imaginarios de la ficción presentan mundos distópicos y extraños. Sus historias se sumergen en el costado más oscuro de la realidad y nos devuelven pesadillas, monstruos y espectros. El género no falsea lo real, más bien revela su verdadera naturaleza. Por su parte, la no-ficción parece alejarse de los “grandes relatos” y, en cambio, se mira a sí misma. Voces femeninas, registros desde la autorreferencialidad, donde lo que más importa es la experiencia, caprichosa y subjetiva. A través de ella se filtran el exilio, la memoria y el archivo.
 
Si en el cine de apariencia más documental se ensimisma el yo, en el de ficción se ensimisma el paisaje. A veces se difuminan las fronteras y queda abierto un territorio para la hibridación. Es este nuevo cine, aquí representado por apenas un puñado de películas, el que ha recolocado a Cuba, de forma paciente, en varios de los principales eventos cinematográficos a nivel internacional. Aunque emplea, en ocasiones, estrategias oblicuas o indirectas, en sus imágenes podemos encontrar algunos de los rasgos que atraviesan y definen la sociedad cubana contemporánea.

Para acercarnos a esa Cuba compleja y contradictoria, más allá de todo pensamiento romántico, les ofrecemos el portal de estas películas. Además de las proyecciones, el ciclo será también una oportunidad para dialogar y reflexionar sobre nuestros muy diversos procesos creativos. Formas de conjurar espejismos de una isla donde el cine suele ser un vértigo, pero también una posibilidad.

Carla Valdés León
José Luis Aparicio Ferrera

Curadores
 

Corazón azul

cine

Corazón azul

Proyección de la película Corazón azul, el 13 de julio

© Casa de América, 2024