Dirección: Héctor Gálvez. Producción: Chullachaki Cine. Coproducción: Ulysses Films (Perú) / Oasis (España), Neue Cameo Film / Autentika Films (Alemania). Productores: Enid Campos, Josué Méndez (Perú). Coproductores: Gudula Meinzolt, Paulo de Carvalho, Teresa Fernández , Cuesta, Luis Ángel Ramírez, Ole Landsjöaasen, Christian Fürst, Annette Pisacane. Productores ejecutivos: Enid Campos, Josué Méndez, Héctor Gálvez. Guión: Héctor Gálvez. Fotografía: Mario Bassino. Dirección de arteIván Lozano Montaje: Eric Williams. Sonido directo: Francisco Adrianzén. Intérpretes: Joaquín Ventura, Yilliana Chong, José Luis García, Gabriela Tello, William Gómez. Realizada con el apoyo de CONACINE (Perú), Programa IBERMEDIA, Filmstiftung Nordrhein-Westfalen (Alemania), Goteborg International Film Festival Fund (Suecia), Visions Sud Est (Suiza). Estreno Mundial Festival de Venecia (Horizontes), Italia, 2009.

Héctor Gálvez (Lima, Perú) Director, guionista y productor. Ha escrito y dirigido una serie de cortometrajes en diversidad de géneros. Paralelamente trabaja en ONGs realizando documentales enfocados en el tema de derechos humanos, producto de esta experiencia ha co-dirigido el documental Lucanamarca. Paralelamente, ha escrito cuentos y relatos cortos, por los que ha obtenido menciones honrosas en el Concurso de las 1000 Palabras de Caretas de 2008, así como en el Concurso de Cuentos Gastronómicos organizado por Matalanga en 2007. Paraíso, su opera prima, formó parte de la selección oficial del Festival de Venecia (Horizontes), y ha participado en otros prestigiosos festivales, como el Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente (BAFICI) y el Festival de Cine Iberoamericano de Huelva, donde obtuvo el Colón de Oro al Mejor Guión de Largometraje. Obtuvo, además, el Premio a la Mejor Opera Prima y el Premio a la Mejor Película de la Crítica Internacional en el Festival de Lima, Perú, 2010 y fue elegida como la mejor película peruana de 2010 por la Asociación Peruana de la Prensa Cinematográfica Peruana (APRECI). Actualmente trabaja en el proceso de desarrollo de NN,su próximo largometraje de ficción.

"Conocí a los chicos del barrio Paraíso de Cajarmarquilla en el año 2000. Llegué para dictarles un taller de video. Las madres se habían acercado a la ONG donde trabajaba en ese momento para pedir que por favor hiciéramos algo con sus hijos, que simplemente no sabían qué hacer. Andaban metidos en pandillas y sus enfrentamientos causaban heridos y más de un muerto. Así que les propuse hacer un taller de lenguaje audiovisual para generar autoestima en ellos y desbloquear sus capacidades creativas. No sabía que desde ese momento empezaría a germinar la idea de esta película. Después de romper el hielo inicial, chicos y chicas me hablaban de sus dudas, de lo que les gustaba hacer, de cómo les iba con su familia, con sus enamorados y enamoradas. Fuimos conociéndonos y se formó una amistad que dura hasta hoy. Los que no habían terminado el colegio tenían todos los planes para el futuro, los que ya lo habían culminado o dejado sabían que la cosa era más dura. Y es que este barrio insertado en medio de una huaca pre-inca y sin agua potable no les brindaba las condiciones ni económicas y sociales para poder salir adelante. No pude dejar de asociarlo a mi juventud, a mis amigos del barrio del Callao y a esa etapa en que simplemente no teníamos rumbo. Los cinco amigos de esta historia fueron creciendo a propia voluntad en cada página del guión, encarnando las muchas situaciones que fueron “robadas” en muchos casos de la experiencia de vida de estos muchachos. No quería ser miserabilista, tampoco era mi intención idealizarlos, solo quería contar cómo pasaban sus días, lo que la amistad significa para ellos, cómo la realidad le va quitando sus sueños, cómo los partidos de fulbito les representa esas ansias de ganar. En medio de este proceso trabajé en la Comisión de la Verdad y Reconciliación, y Paraíso tomó otro significado para mí: ahora toda la historia sucedería en el mismo barrio remarcando la asfixia y aprisionamiento en el que viven. Ahora que la película está terminada no sé si les hice del todo justicia, si toda la chispa y picardía que tienen en sus conversaciones de grupo han quedado reflejadas, si he tenido los mejores finales para ellos. Uno siempre queda insatisfecho. Pero si el público los empieza a mirar más de cerca y con otros ojos, yo me sentiré más que contento".