El ritmo sigue en el 2002
25 años de música
Patricia Manterola tenía razón con eso de "que el ritmo no pare". En 2002 nacieron muchas canciones que nos invitaban a estar de cualquier forma menos quietos. La banda multinacional de pop latino Bacilos hacía sonar aquello de Caraluna, que arrastraba a todos a dar palmas. Tampoco nos dejaba indiferente la balada Y tú te vas, el tema del artista puertorriqueño Chayanne, que sacó a la calle ese año su disco de grandes éxitos.
No pasó inadvertido el conocido tema A Dios le pido, del músico colombiano Juanes, que también en 2002 compuso Fotografía, su tan popular colaboración con la canadiense Nelly Furtado.
El rock experimental y los tonos indies iban acompañados por los argentinos Babasónicos y por la mexicana Natalia Lafourcade que publicó algunos temas como En el 2000. De una mexicana pasamos a una española: Natalia Rodríguez publicaba su canción Vas a volverme loca. Dentro del pop aparecía María Fernanda Blázquez Gil conocida como Fey, una cantautora mexicana de música pop y electrónica a la que conoceríamos por temas como Noche ideal. La banda Latins con Sigue bailando no solo formó parte del pop del 2002, sino que también dejó tras de sí una coreografía que muchos intentaron aprender. Aunque sin duda, del baile del que nadie pudo escapar fue de Aserejé de Las Ketchup.
Vamos a cerrar este año con tres artistas que, además de cantarle al amor y a la herida, tienen una voz tan singular como sobrecogedora: Ricardo Arjona compuso Santo Pecado, un disco con temas desgarradores como El problema o Dame. En cuanto a Maná, a principios de 2002 la banda se encerró para crear lo que cinco años después sería su álbum Sueños líquidos. Sin embargo, también lanzaron en este año Revolución de amor con canciones que ya se han convertido en clásicos como Ángel de Amor o Mariposa Traicionera. Por último, no podemos olvidarnos del famoso Lady Blue del artista español Enrique Bunbury, ¿es un tema ecologista que habla sobre la tierra o se refiere a la pérdida de una mujer? Muchos han intentado encontrarle significado a esta canción: no importa. Seguiremos escuchándola aunque no lleguemos a saber que quería decir Bunbury.
¿Se nos ha olvidado algún tema? ¡Refréscanos la memoria añadiendo tus canciones a la lista de Spotify!
